Echinopsis

Echinopsis

Las echinopsis son un género de plantas perennes perteneciente a la familia de las cactáceas. La cual, cuenta con más de 170 especies. Aunque bien es cierto, que esta cifra no se ha sabido determinar con exactitud debido a la falta de consenso entre los diferentes botánicos que estudian este género de cactus.

Este género en concreto es fácil de reconocer, ya que destaca principalmente por dos cosas. La primera es la forma alargada de sus tallos globosos, los cuales tienen espinas en forma de estrella radial que le sirven de protección. Y la segunda son sus grandes flores de colores claros, principalmente blancas, rosadas o rojizas. Las cuales suelen aparecer a finales de la temporada primaveral.

Entornos donde se encuentra la Echinopsis

Al igual que otros géneros de cactáceas, la Echinopsis es originaria del continente Sudamericano, siendo especialmente común en países como Argentina, Chile o Ecuador.

Echinopsis salvaje

En la naturaleza la Echinopsis se suele encontrar en entornos con tierras arenosas que le permiten un buen drenaje. Sin embargo, gracias a ciertos factores como su resistencia al frío, los pocos cuidados que demandan y especialmente a la vistosidad y tamaño de sus flores, es común ver este género de cactus en los hogares de muchas personas.

Trasplante y multiplicación de la Echinopsis

Como ocurre con otros géneros de cactus como la Opuntia o la Mammillaria Existen dos métodos diferentes para conseguir plantar con éxito un cactus Echinopsis, a través de esquejes o por semilla.

Esqueje de echinosis

La plantación por esquejes es un método muy sencillo de realizar que nos permitirá tener una planta muy parecida a la que ya tenemos, Esto se debe principalmente a que de este modo no afectarán a nuestra Echinopsis las posibles variaciones genéticas que pueden ocurrir a través de la plantación por semillas.

Para realizar este método de plantación, deberás cortar con un cuchillo afilado o un cúter cualquiera de los brotes basales que crecen en la base del cactus. Una vez cortados se tendrá que observar si cuentan con raíces o no. En caso de no tenerlas, antes de plantarlo en otro macetero, deberás dejar reposar el esqueje durante una semana para permitir que se seque y empiecen a salirle las primeras raíces. Si por el contrario sí que cuenta con algunas raíces que le puedan suministra agua y nutrientes del sustrato, deberás de plantarlo de inmediato para evitar así que las raíces empiecen a pudrirse y dejen de ser efectivas.

En ambos casos, el sustrato que utilices para plantar tu Echinopsis ha de ser muy poroso para permitir un correcto drenaje del mismo. Por eso, aparte de usar una mezcla entre sustrato especial para cactus mezclada con arena gruesa en una proporción de dos a uno, deberás de proporcionar a la base de tu macetero un drenaje correcto que le permita expulsar el exceso de agua con rapidez. Para ello, la mejor manera es usar un macetero con varios orificios de drenaje y poner en la parte inferior del mismo una capa de arena gruesa o perlita, ya que estos son materiales que permiten drenar muy bien el agua e impedirán que se produzcan estancamientos.

Finalmente, una vez hayas trasplantado completamente el esqueje, deberás de regar con abundante agua empapando todo el sustrato por igual y repetir este proceso durante unos días, evitando que el suelo pierda demasiada humedad. Al cabo de una semana aproximadamente, ya podrás tratarla como si fuera adulta, disminuyendo la frecuencia de riego y llevándola a un lugar luminoso y ventilado.

En cuanto a la plantación por semillas, la época ideal para realizarla es al inicio de primavera, ya que en estas fechas se cumplen la mayoría de las condiciones necesarias para que la Echinopsis crezca de la manera adecuada.

Echinopsis pequeña con espinas

Para llevar a cabo la plantación, lo ideal es usar un macetero pequeño o incluso un semillero, en el que introduciremos el sustrato mezclado con arena gruesa de la manera en la que se ha explicado anteriormente. Posteriormente se introducirá la semilla y se le echará más sustrato hasta que esté completamente cubierta. Una vez la semilla esté plantada se regará abundantemente y se prestará atención en que el suelo no piedra demasiada humedad. De la misma forma, también se colocará el macetero en un lugar en el que la temperatura ronde los 20 grados centígrados y no le dé el sol de manera directa para evitar que el agua del sustrato se evapore demasiado rápido.

Al cabo de un par de meses, y siempre en función de la evolución que haya seguido tu Echinopsis, podrás empezar a tratarla como si fuera una planta adulta, reduciendo la frecuencia de riego y llevándola a un lugar más luminoso y ventilado.

Cuidados del género Echinopsis

A pesar de la fortaleza de este género de cactus, los cactus Echinopsis necesitan unos cuidados mínimos para crecer de manera óptima. Estos cuidados pasan por diferentes aspectos que se han de tener en cuenta.

cactus echinopsis

En primer lugar, se ha de regar a nuestro cactus de manera adecuada en el momento preciso. Con esto nos referimos a que, aunque estas plantas sean bastante resistentes en general, si queremos que nuestra echinopsis crezca correctamente deberás de regarla cuando el terreno se muestre bastante seco.

Si mantenemos el macetero en un lugar bien iluminado y ventilado, lo normal sería tener que regarlo cada siete u ocho días. Llegados a este punto es importante regar bien todo el sustrato de manera uniforme y asegurarse de que el agua drena correctamente para evitar encharcamientos. Esto, como se ha explicado anteriormente, se debe a que un exceso de agua en el sustrato de nuestro cactus podría ocasionar su muerte.

Echinopsis en macetero

En segundo lugar, también se ha de tener en cuenta la ubicación de nuestro cactus. Esta debe de ser en un sitio en el que reciba luz directa durante todo el año, ya que necesita mucha luz para crecer adecuadamente. Además, si posicionamos el macetero cerca de una ventana, se deberá de tener especial cuidado con los efectos lupa que pueden ocasionar los cristales. Esto se debe a que si se produce dicho efecto e incide directamente sobre nuestra planta podría ocasionar que ciertas zonas se quemen, pudiendo incluso llegar a matar a nuestra echinopsis.

Por último, si quieres que tu echinopsis desarrolle esas flores tan grandes y espectaculares que la caracterizan, es importante que la mantengas a una temperatura adecuada, no siendo ni demasiado fría ni demasiado calurosa. Por eso, lo ideal es que esté entre los 12 y los 25 grados, aunque puede soportar en invierno temperaturas ligeramente inferiores, en torno a los seis o siete grados.

Enfermedades y plagas de los cactus Echinopsis

Al igual que en otros géneros de cactáceas, tendrás que prestar especial atención a las posibles plagas y enfermedades que pueda parecer tu echinopsis. Esto se debe a que la mayoría pueden solucionarse si se cogen a tiempo, pero si la enfermedad o la plaga avanza demasiado, es probable que no seas capaz de salvarla.

Una de las principales enfermedades a las que se suelen enfrentar la mayoría de las cactáceas es la pudrición de las raíces por exceso de riego. Si esto ocurre, la planta se volverá arrugada y de un color más oscuro. Además, perderá gran parte de su rigidez, pudiendo incluso llegar a doblarse por completo si la enfermedad ya está muy avanzada.

Echinopsis con flor

En este caso, lo esencial es evitar cualquier clase de riego para intentar que el sustrato se seque lo más rápidamente posible. Pero has de saber, que llegados a este punto lo más probable es que tu cactus no consiga salir a delante.

Otra enfermedad común en las cactáceas, es la aparición de grietas en el tallo que suelen indicar que la planta está soportando unas temperaturas excesivamente frías. Por lo que para conseguir que se sane, deberás de trasladar tu cactus a una zona de la casa en la que reciba luz natural directa durante la mayor parte del día y haya una mayor temperatura ambiente.

Por último, una plaga común en la mayoría de los géneros de cactus, es la cochinilla. Esta se caracteriza por la aparición de bultos de color blanco en el tallo del cactus, los cuales son los insectos que se están alimentando de la savia de la planta. Para eliminarlos, la mejor manera es impregnar un bastoncillo de oído con alcohol y frotar a los insectos con ello repetidamente a lo largo de varios días. A los pocos días observarás cómo empiezan a caerse.

Una vez ya no queden más insectos en el cactus, limpia con gua los tallos donde se encontraba la plaga para eliminar cualquier resto que haya podido quedar, así como del alcohol que has usado para el tratamiento.

Si observas que el número de estos insectos sigue creciendo o si tu echinopsis es demasiado grande para realiza el tratamiento explicado, puedes usar productos químicos específicos para este fin que encontrarás en diferentes establecimientos especializados.

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