Opuntia

Imagen de opuntia

La opuntia es un género de plantas perennes perteneciente a la familia de las cactáceas la cuál abarca más de 300 especies diferentes. Se caracteriza por tener tallos verdes divididos en segmentos con forma plana y por ser muy resistentes en épocas de sequía, ya que es capaz de acumular una gran cantidad de agua en su interior.

A pesar de que es originaria del continente americano, también se pueden hallar en Europa y en otras zonas del globo, ya que los colonos españoles la introdujeron en Europa buscando encontrar una nueva especie de cultivo que poder usar en los suelos poco productivos del sur de la península ibérica, extendiéndose a partir de ahí a toda la zona del mediterráneo.

Hábitats de la opuntia

Como ya hemos comentado, la opuntia es originaria del continente americano. De ahí que esta planta esté muy arraigada en su cultura. Tanto es así, que incluso México, país originario de este género de cactus, incluye una imagen de una opuntia en el diseño de su bandera.

Además, dado que necesita una escasa cantidad de agua y pocos cuidados, es común encontrar este tipo de plantas en los jardines y en los maceteros de las casas situadas en zonas de escasa lluvia y altas temperaturas.

Plantación de la opuntia

Las opuntias se pueden reproducir de dos maneras diferentes en función de la época del año en la que se quiera llevar a cabo.

En verano la mejor manera de hacerlo es a través de la plantación de las semillas que se encuentran en su interior. Para ello, una vez extraídas, hay que limpiarlas con abundante agua para eliminar todos los restos que pueda tener.

Una vez estén limpias las echaremos en un semillero vegetal o un tiesto pequeño con sustrato especial para cactus y la regaremos de manera abundante.

Imagen de Opuntia-con-espinas

 

Por otro lado, si nos encontramos ente los meses de abril y junio, otra forma muy eficaz de conseguir que se reproduzca nuestro cactus opuntia es a través de esquejes.

Para ello, solo tendremos que cortar cuidadosamente lo más cerca que podamos del tallo el segmento de nuestro cactus que queramos usar, introducirlo en un macetero relleno de sustrato especial para cactus y regar de manera abundante durante unos días.

Como puedes observar, se utilizará una forma u otra en función del tamaño de la planta que tengamos y la estación del año en la que nos encontremos.

Cuidados de la opuntia

Como es bien conocido, las plantas pertenecientes a la familia de las cactáceas, no requieren muchos cuidados, dado que al acumular tanta agua en su interior aguantan muy bien las sequías. Es por esto que son muy recomendables para hogares en los que no se quiera dedicar mucho tiempo a sus cuidados, ya sea en interior o en exterior.

No obstante, aunque son plantas muy agradecidas, sí que necesitan algunos cuidados específicos que difieren en función de si las tenemos en maceta o en un espacio abierto como un jardín.

Si nuestra opuntia está plantada en una maceta, es importante que la situemos en una zona en la que le dé el sol de manera directa, lo que hará que sea necesario que la reguemos unas dos veces por semana, ya que la tierra se secará mucho más rápido.

Imagen de opuntia en exterior

Mientras que, si decidimos plantar nuestra opuntia en el jardín, tendremos que tener en cuenta que este género de cactus puede llegar a tener un tamaño importante, por lo que es recomendable tener este aspecto en cuenta cuando se planten, haciéndolo en una zona lo suficientemente amplia y ubicada de tal manera que pueda recibir luz de forma directa la mayor parte del día.

En cuanto al riego no es necesario realizar un regado abundante, y con hacerlo una vez por semana será más que suficiente para que nuestra opuntia crezca de la manera más adecuada.

Enfermedades y plagas de la opuntia

A pesar de que es un género muy resistente, existen ciertas enfermedades que hay que vigilar para evitar que nuestra opuntia las sufra.

Una de las enfermedades más destacadas y comunes es la pudrición de la raíz a causa de un hongo llamado Phytophthora. Este hongo suele aparecer cuando hay un alto grado de humedad en el sustrato de nuestro cactus a causa de un riego excesivo.

La mejor forma de identificarlo es observar las paletas de nuestro cactus, ya que de tener esta enfermedad notaremos como algunas de ellas están algo marchitas y arrugadas.

A pesar de que este tipo de enfermedad es difícil de erradicar, la mejor manera de controlarla es eliminar el exceso de humedad de nuestro sustrato drenándolo, reducir la frecuencia de riego y aplicar un fungicida al suelo para intentar eliminar el hongo que le causa la enfermedad.

Por otro lado, si no le realizamos los cuidados necesarios, puede darse el caso que nuestra opuntia se vea afectada por ciertas plagas como puede ser el gusano cebra, de color negro con rallas blancas que crea unas protuberancias claramente reconocibles en las palas de nuestro cactus.

Si detectamos que nuestra opuntia puede tener esta plaga, se deberá de eliminar las protuberancias, debiendo incluso cortar la pala del cactus si la plaga estuviera demasiado extendida en ella. Posteriormente, se deberá eliminar a los gusanos que pueda haber en la planta y vigilar que no vuelvan a aparecer en las siguientes semanas.

Por último, otra plaga común es la de la grana o cochinilla, el cual es un insecto terrestre de pequeño tamaño que genera una especie de algodón blanco que utiliza para proteger a sus huevos. Suele aparecer en la base de la planta y va atacando a sus frutos y las palas hasta provocar su muerte.

Imagen de opuntia cochinilla plaga

Esta plaga se puede tratar impregnando con aceite de parafina un algodón o bastoncillo de oídos y restregándolo por la zona afectada de la planta y repitiendo este proceso hasta que observemos que ha desaparecido por completo, siendo además de vital importancia que en caso de detectar una planta con esta plaga se aleje del resto dado que esta se traslada a una gran velocidad.

La gastronomía y la opuntia

Como es bien conocido, la opuntia es un género de cactus comestible que se lleva empleando en la gastronomía suramericana y especialmente en la mexicana desde hace generaciones debido a su alto contenido en fibra, vitaminas, minerales y un sinfín de nutrientes.

Imagen de Higos-Chumbos

 

Además, gracias este alto contenido en nutrientes, a este género de cactus se le atribuyen propiedades medicinales, siendo común su uso para ayudar a la digestión, eliminar la diarrea, la limpieza del organismo y la eliminación de grasas.

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